sábado, agosto 12, 2006

Paseo 51: La loca de la casa de Rosa Montero; Barcelona: Círculo de lectores, 2003


Leo estos días un libro de Rosa Montero donde, como decía Santa Teresa de Jesús, "la imaginación es la loca de la casa". Se dan cita en él la imaginación, las memorias, las observaciones, los recuerdos, la autobiografía real al lado de la inventada, el humor, la reflexión sobre la propia escritura y sobre diversos escritores que han llamado su atención a lo largo de los años.El libro es entretenido y curioso. Hay una parte del mismo que me ha llamado mucho la atención y es cuando Rosa Montero se hace eco del planteamiento de Nuria Amat en su ensayo Letra herida . En él aparece el difícil dilema para un escritor entre:
-Elegir no volver a escribir o no volver a leer nunca.
Rosa Montero señala que un 90% escoge leer, ella misma también. Aporta una serie de razones bastante interesantes y que podrían prestarse a un debate si os parece. Las reproduzco a continuación:


¿Cómo puede una apañárselas para vivir sin la lectura? Dejar de escribir puede ser la locura, el caos, el sufrimiento, pero dejar de leer es la muerte instantánea. Un mundo sin libros es un mundo sin atmósfera, como Marte. Un lugar imposible, inhabitable. De manera que mucho antes que la escritura está la lectura, y los novelistas no somos sino lectores desparramados y desbordados por nuestra ansiosa hambruna de palabras. Hace poco escuché hablar en público, en Gijón, a la escritora argentina Graciela Cabal, en una intervención divertidísima y memorable. Vino a decir (aunque ella se expresaba mejor que yo) que un lector tiene la vida mucho más larga que las demás personas, porque no se muere hasta que no acaba el libro que está leyendo. Su propio padre, explicaba Graciela, había tardado muchísimo en fallecer, porque venía el médico a visitarle y, meneando tristemente la cabeza, aseguraba: "De esta noche no pasa"; pero el padre respondía: "No, qué va, no se preocupe, no me puedo morir que me tengo que terminar El otoño del patriarca ". Y, en cuanto que el galeno se marchaba, el padre decía: "Traedme un libro más gordo".

[...] Y es que la muerte también es lectora, por eso aconsejo ir siempre con un libro en la mano, porque así cuando llega la muerte y ve le libro se asoma a ver qué lees, como hago yo en el colectivo, y entonces se distrae.

Graciela tiene razón: uno no sólo escribe, sino que también lee contra la muerte." (pág. 161)


Os hago extensiva la pregunta: si tuvierais que elegir entre leer y no escribir o escribir y no leer nunca más... ¿qué elegiríais? Os dejo meditando.








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13 Comments:

Blogger Portobello said...

Está claro que leer, porque de eso se nutre el escritor. Un escritor que no lee es como un coche sin ruedas, no sé algo incomprensible. Muy acertado lo de la vida más larga del lector, y más intensa, y más vivida, y ...lo que no entiendo es que no se lea. Que pobreza más grande una casa sin libros, es una casa huerfana de sabiduria. Es una cosa que siempre me fijo y me habla de las personas.

sábado, 12 agosto, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Interesante controversia. Yo creo que elegiría el leer, voy como dice la autora siempre con un libro a cuestas y, aunque me costara dejar de escribir, reconozco que seguiría escribiendo aunque sólo fuera casi inconscientemente en mi imaginación.Un besote.

domingo, 13 agosto, 2006  
Blogger Clarice Baricco said...

Me quedo y me muero leyendo.
No tendría otra salida mejor que estar con la piel de un libro.

Un abrazo...

domingo, 13 agosto, 2006  
Blogger Meritxell2000 said...

Me parece que vamos a ser más los lectores que los escritores. Yo sin dudarlo ni por un momento me decantaría por leer a diestro y siniestro. ¿Cómo me iba a quedar sin conocer tanto como se ha escrito, tanto clásicos como modernos que no he leído todavía? Me pica más la curiosidad por ver esas vidas puestas en papel, tan distintas a la mía, que indudablemente son más interesantes y a mí me tienen enganchadas desde hace un montón de años. Sin la literatura no podría disfrutar realmente de mi tiempo de ocio, así que dejamos que inventen otros...jejejeje

Un beso, Gatito-de-un-año-de-blog.

domingo, 13 agosto, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Leer para vivir, que dijo Flaubert (creo)... Además, lo de escribir, bueno, como dijo aquél: no, soy muy respetuoso con mis lectores...
Un saludo, y que sigas paseando.

miércoles, 16 agosto, 2006  
Blogger Magda Díaz Morales said...

Yo creo que preferiría escribir. Leer es vital, pero ¿leer y no poder expresar lo que queremos a otros a través de la palabra escrita? Mejor e echar a volar nuestra imaginación y compartirnos.

Muy dificil pregunta.

miércoles, 16 agosto, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Leer no es una opción; es un imperativo. Leer y leer. Escribir es una opción.
un abrazo gatito

miércoles, 16 agosto, 2006  
Blogger pies diminutos said...

Leer, leer, leer. Todo lo que yo pudiese escribir en una vida entera y sin interrupción, probablemente no llegaría a la altura de un solo poema de, por ejemplo, César Vallejo. Así que prefiero leerlos a ellos, a "los buenos",jajaja.

lunes, 21 agosto, 2006  
Blogger Manuel said...

Leer al 100%

Que para escribir solo es necesaria la imaginación

Saludos

martes, 22 agosto, 2006  
Blogger Gatito viejo said...

Elegiría leer también, siempre leer... Leer, leer y leer... pero seguro que a escondidas, y sin que nadie lo supiera, infringiría esa orden, esa ley, y escribiría para mí, porque es una necesidad leer, pero también lo es escribir y no porque considere que mis escritos son mejores o peores, ya digo, sino por necesidad interior, por desahogo. Por no sé qué razón... Y es que, como alguien dijo una vez "El arte empieza en aquel punto en que vivir no basta para expresar la propia vida".

Gracias a todos por vuestra compañía en este paseo. Bienvenidos a los que se incorporan por primera vez. Saludos y un abrazo. Nos vemos en el próximo paseo

martes, 22 agosto, 2006  
Blogger Santino said...

También yo escogería necesariamente la lectura, porque entiendo que la escritura siempre tiene un peldaño previo que es el de la lectura, por el cual hay que pasar obligatoriamente. Sin embargo, es difícil (por no decir imposible) rechazar a lo que para mí es la otra cara de la moneda.

Un saludo.

martes, 29 agosto, 2006  
Blogger Rain (Virginia M.T.) said...

Hola.
Lo que haría es escribir, porque recordaría lo que he leído. Escribiría, mas a mi vez sentiría una gran tristeza por la imposibilidad de leer. Ese caso podría darse en una prisión donde buscaran la tortura para quien, saben, ama la lectura.

Me alegrp que tu hipotética pregunta, sea precisamente, hipotética, el implícito planteo de una terrible disyuntiva.

Este libro (confieso que aún no lo he leído) me atrae ya por la reseña que has hecho. He leído apenas un libro de Rosa Montero y suelo leer su columna que sale en EL Comercio, diario peruano. Excelente.

Un gran salute .

lunes, 11 septiembre, 2006  
Blogger Gatito viejo said...

Santino, sí, las dos caras de la misma moneda, eso es escribir y leer. Mejor definición imposible.

Vir&,Rain, sabía que tú escribirías. Lo sabía... No dejes de hacerlo nunca. Es verdad que es una difícil elección. Menos mal que sólo era un planteamiento por mero juego.(Un juego vital, por otro lado)

Un abrazo a los dos

lunes, 11 septiembre, 2006  

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